Para Forbes: "Mujeres poderosas", para el Mexicano comun: " paisas chingonas"

Estoy suscrita al canal de FORBES en YouTube; recientemente se han hechos entrevistas, reportajes etc, acerca de  mujeres Mexicanas que han logrado resaltar sus nombres dentro de diferentes medios, lo cual para todas las de mi género, es una grandiosa manera de inspirarnos a realizarnos en todos los ámbitos. Pero una vez más, se nos olvidan las clases de abajo.

Cuando lavamos una manzana y le quitamos la etiqueta que dice "Washington", pocas veces pensamos en el arduo trabajo que se efectuó para que podamos disfrutar de las mismas, es precisamente de las mujeres que hacen eso posible de las que quiero escribir.

Ellas son mujeres como tu y yo; quienes no tuvieron la oportunidad de crecer en una clase social media-privilegiada y que buscando una mejor vida tuvieron que emigrar a EUA para lograr el mentado " sueño americano".

Levantarse a las 3:30 am todos los días para preparar el "lonche" propio y el de su marido, para arreglar a los hijos y dejarlos con la niñera y sobre todo para llegar a tiempo a su jornada laboral que regularmente empieza a las 5 am; a eso yo le llamó una "Paisa chingona". Ellas son mujeres que después de 10 hrs de jornada laboral, bajo temperaturas de hasta 90 Farenheits bajo el sol aguantando alergias distintas al polen y/o pesticidas, con una carga de trabajo físico impresionante son capaces de  llegar a sus casas a hacer todos los deberes de una ama de casa, trabajo por el cual no se les paga en ninguna denominación monetaria. Ellas son mujeres con mil y un sueños frustrados porque precisamente "no hay de otra" o porque ya están acostumbradas. Ellas son mujeres con fracasos matrimoniales y de parejas pero madres luchonas siempre tratando de sacar a los hijos adelante.
Para todas esas "paisas" también debería de haber reportajes que les ayuden a tener un mejor autoestima y confianza en si mismas, para enseñarles que si hay de otra, y que es tan importante su realización como la de las mujeres de otras clases sociales, que ser mujer no es símbolo de sexo débil y por consecuencia no deben ser sometidas en ningún aspecto por sus compañeros o maridos.

Debo confesar que el venir a trabajar al  "fil" ( field) dejó de ser un experimento social para convertirse en un reto físico/personal.

Si hay alguien por allí leyendo esto con aspiraciones políticas, denle un enfoque grande a su campaña en materia de inmigraciones y políticas para que las familias permanezcan juntas y las mujeres tomen el valor tan grande que tienen.
Es hora de que que ambos sexos trabajemos juntos para generar bienestar real.